Esta escultura de bruja es una pieza artesanal que combina creatividad y detalle en su diseño. Con una altura de 50 cm, presenta un aspecto encantador y místico, destacando por el acabado en esmalte que aporta brillo y realza la textura de la cerámica. La figura de la bruja, realizada en ardilla roja, muestra una vestimenta detallada y una expresión característica, acompañada de elementos como su sombrero puntiagudo y una escoba. Es una pieza ideal para coleccionistas y amantes del arte que deseen añadir un toque de fantasía y misterio a su decoración.